Los malos no descansan nunca

Ni con frío polar, ni con calor africano, nunca descansan.
Las vidas de esos tipejos/as (porque de ambos sexos hay) deben ser las más aburridas, insulsas e insoportablemente vacías de todo el universo.
Si en ellas hubiera algo, aunque fuese una mínima brizna de humanidad, no dedicarían todos sus esfuerzos, sus atenciones y sus desvelos a machacar, inmisericordemente y sin tregua, a cualquiera a quien hayan elegido como blanco de sus dardos envenenados.
Lo peor es que la Justicia, en muchos casos, les ampara, dejando en la indefensión más absoluta a las pobres víctimas.
El "denuncia que algo queda"es una de sus técnicas favoritas, a fuer de mentir, el pobre denunciado se cansa y se toma la revancha, y en ese momento, le cazan como a un conejo.
Yo les sacaría toda la piel y les dejaría al sol de julio de las cuatro de la tarde....que GENTUZA.
 

Comentarios

Entradas populares de este blog

Sobresaltos.

Tan deprisa, tan despacio.

Somos personas y esto una pandemia.